
El presidente Javier Milei volverá a pisar suelo fueguino el próximo lunes 29 de septiembre con el objetivo de apuntalar a los candidatos de La Libertad Avanza (LLA) de cara a las elecciones legislativas del 26 de octubre.
La visita del mandatario ocurre en un contexto de fuerte malestar social y político en Tierra del Fuego, una provincia que ha sido reiteradamente atacada por el Gobierno nacional desde el inicio de su gestión. Los embates en contra del subrégimen industrial fueguino —clave para el desarrollo económico, la generación de empleo y la soberanía en la región austral— despertaron amplio rechazo en distintos sectores, que acusan al Ejecutivo de querer desmantelar el entramado productivo local bajo el pretexto de un supuesto “ajuste” fiscal.
A ello se suman las consecuencias económicas del gobierno nacional libertario marcado por una inflación persistente que golpea el poder adquisitivo, la parálisis del consumo interno y una crisis industrial que afecta con especial dureza a la provincia más austral. En paralelo, el Gobierno profundizó un endeudamiento externo sin precedentes, con el objetivo de contener el dólar en plena campaña electoral, hipotecando el futuro económico del país y agravando su dependencia financiera.
El acto en Ushuaia, previsto para las 18 horas, estará atravesado por un fuerte simbolismo político: en abril pasado, el Concejo Deliberante local declaró a Milei “persona no grata”, luego de que el mandatario relativizara la causa Malvinas en el marco del homenaje a los caídos el 2 de abril.
“Anhelamos que los malvinenses decidan algún día votarnos con los pies a nosotros”, sostuvo entonces, en declaraciones que generaron indignación nacional y derivaron en una denuncia por traición a la Patria presentada por la Confederación Nacional de Combatientes de Malvinas.
Será la tercera visita de Milei a Tierra del Fuego, aunque en ninguna de sus anteriores apariciones mostró disposición al diálogo con el gobierno provincial. Primero viajó a la Antártida —bajo jurisdicción fueguina— y luego encabezó un acto en la Base Naval de Ushuaia junto a Laura Richardson, exjefa del Comando Sur de Estados Unidos, una actividad que también despertó críticas por la falta de contacto con las autoridades locales.
En las próximas elecciones, Tierra del Fuego renovará tres bancas en el Senado y dos en Diputados. Actualmente, el peronismo ostenta la mayoría en la Cámara alta con Cristina López y María Eugenia Duré, mientras que la UCR cuenta con el escaño de Pablo Blanco. En Diputados, finalizan los mandatos de Ricardo Garramuño (Somos Fueguinos) y Carolina Yutrovic (Unión por la Patria).
La llegada del presidente ocurre, así, en un clima político y social enrarecido, con una provincia que resiste los embates del ajuste, cuestiona el modelo de endeudamiento compulsivo y reclama respeto a su soberanía productiva.