
La ministra de Obras y Servicios Públicos, Gabriela Castillo, destacó que el convenio que transfiere siete áreas hidrocarburíferas de YPF a la empresa estatal Terra Ignis Energía representa “una oportunidad única para Tierra del Fuego”, entendiendo que “es central que la Legislatura sesione y acompañe este acuerdo”.
El acuerdo, ya firmado por el gobernador Gustavo Melella, garantiza la continuidad laboral de los trabajadores del sector -quienes serán tomados por la empresa provincial por un año- y evita el colapso económico que significaría la salida desordenada de YPF, que concentra sus inversiones en Vaca Muerta.
El traspaso incluye los yacimientos de Lago Fuego y las fracciones A, B, C, D y E en la zona de San Sebastián, con una extensión de concesión por 10 años. Esto permitirá a Terra Ignis Energía revertir la caída en la producción mediante nuevas inversiones y tecnología, recuperando pozos abandonados a medio perforar. Además, el modelo otorga a la provincia el control estratégico para asociarse con otras empresas y decidir sobre la exploración y explotación, abriendo la puerta al desarrollo de industrias de valor agregado, como la petroquímica, en suelo fueguino.
Castillo aclaró que los pasivos ambientales de mayor complejidad seguirán a cargo de YPF, la cual ya comenzó trabajos de remediación, y que se estableció un período de transición de hasta cuatro meses para una transferencia operativa ordenada.
Paralelamente, la funcionaria confirmó avances en la nueva central termoeléctrica con tecnología china, cuyos equipos están en fase de producción.
Por otra parte, Castillo realizó un enfático llamado a la Legislatura para que trate y apruebe el convenio. “Es central que la Legislatura sesione y acompañe este acuerdo. La no aprobación implicaría dejar a trabajadores en la calle y perder la oportunidad histórica de tomar las riendas de nuestro desarrollo energético”, remarcó.
