
Los principales gremios de Tierra del Fuego llevaron adelante este miércoles un paro general con movilización en rechazo a la reducción de aranceles e impuestos internos para la importación de productos electrónicos, dispuesta por el gobierno de Javier Milei. Los sindicatos, al igual que el gobierno fueguino, consideran que la medida pone en riesgo miles de puestos de trabajo en la Provincia.
Tanto el gobierno provincial como los tres intendentes municipales se manifestaron en contra del decreto libertario y salieron en defensa de la industria y el subrégimen de promoción. El mandatario fueguino, Gustavo Melella, convocó a los representantes de los trabajadores del sector industrial y a los empresarios de Tierra del Fuego para este jueves 22, con el objetivo de avanzar en la firma de un acuerdo que garantice los puestos de trabajo y proteja al sector productivo.
En Tierra del Fuego, hay un total de 58 empresas, de las cuales 34 fabrican bienes electrónicos de consumo. Todas paralizaron su producción desde la semana pasada cuando se conoció el anuncio de las medidas oficializadas este martes.
Según la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica (Afarte), en la provincia trabajan 8.500 personas de manera directa y 7.300 de forma indirecta en la industria electrónica, produciendo el 94% de los teléfonos celulares, televisores, acondicionadores de aire, cocinas de microondas y electrónica para automóviles que se utilizan en Argentina. La entidad hizo equilibrio luego de conocida la medida oficial. De hecho, Mirgor, una de las dos principales plantas de producción, propiedad de Nicolás Caputo, primo del ministro de Economía, Toto Caputo, envió una carta a su personal garantizando la continuidad de las fuentes laborales.