A seis asciende el número de funcionarios ñoquis enquistados dentro del gabinete municipal de Ushuaia que ni siquiera residen en la capital fueguina. El último caso que se conoció es el de Héctor Ercilio Verón, quien lleva dos años afectado a un cargo dentro de la Secretaría de Hábitat y Ordenamiento Territorial sin siquiera moverse de su ciudad de residencia: Río Grande.
De acuerdo al último padrón electoral dado a conocer a comienzos de noviembre por la Cámara Nacional Electoral , Verón figura con domicilio en Río Grande. Es más, está habilitado a votar en esa ciudad en las elecciones PASO de agosto próximo.
El puntero político alineado al vuotismo fue candidato a concejal por Río Grande en las elecciones de 2019 por el denominado Partido Provincial “Juntos por Tierra del Fuego”.
El funcionario “fantasma” ni siquiera concurrió a la presentación que la semana pasada realizaron las autoridades de la Secretaría de Hábitat y Ordenamiento Territorial del proyecto de presupuesto municipal 2023 en el Concejo Deliberante.
La última vez que Verón fue visto en Ushuaia se remonta a agosto pasado cuando el Coordinador de Producción Social de Hábitat se hizo presente a la sesión de la Convención Constituyente Municipal. El funcionario “ñoqui”aplaudió -desde el sector del público- cada intervención del entonces convencional (Más Ushuaia) Walter Vuoto.
La polémica designación de Verón se asimila a otros funcionarios “ñoquis” designados por Vuoto que residen en Río Grande sin cumplir ningún tipo de función para el Estado Municipal de Ushuaia.
Allí se incluyen los casos del Subsecretario de Enlace Provincial del Municipio, Ezequiel Murray, que sólo pertenece al Gabinete Municipal por un acuerdo político entre Vuoto y la ex gobernadora Rosana Bertone. También se encuentra en esa misma situación Pablo Héctor Cardozo, subsecretario de Articulación y Gestión Política de la Municipalidad de Ushuaia.


A ese plantel de punteros políticos de Río Grande refugiados en la estructura municipal de Ushuaia se le suman los casos de Abel Donatti y Carlos Gabriel Mucci. Ambos integrantes de la Agrupación peronista 8 de Octubre de Río Grande, gozan de contratos de locación con el Municipio de Ushuaia por misteriosas tareas en la ciudad del norte de la provincia.
El último caso relevado es el de Maximiliano Pot, domiciliado en Río Grande, quien por sus actividades de militancia política con el vuotismo percibe del Estado Municipal de Ushuaia unos $165 mil mensuales.